¿Por qué compramos lo que compramos? Esta pregunta ha intrigado a vendedores, psicólogos y curiosos por igual. Necesidades, deseos y motivadores son los hilos invisibles que tejen las decisiones de los consumidores. En este artículo, exploraremos estos elementos del comportamiento del consumidor para comprender su importancia y la ventaja que significa para el mundo de las ventas.
Ernest Dichter y Víctor Schwab, dos pioneros en la investigación de marketing, comenzaron a desentrañar estos secretos del comportamiento del consumidor, por allá en las décadas de 1940 y 1950. Luego, otros investigadores nos han dejado valiosos aportes. Estos son algunos de los autores más destacados:
Una necesidad es una carencia o falta que un individuo siente y que es esencial para su supervivencia o bienestar. Las necesidades pueden ser fisiológicas (como el hambre y la sed) o psicológicas (como la necesidad de seguridad y pertenencia).
Un deseo es una forma específica de satisfacer una necesidad. Mientras que las necesidades son universales y constantes, los deseos son influenciados por la cultura, la personalidad y las experiencias individuales.
Los motivos de compra son las razones o impulsos que llevan a los consumidores a decidir adquirir un producto o servicio. Estos motivadores pueden ser conscientes o inconscientes y varían ampliamente entre individuos y situaciones. En esencia, los motivos de compra responden a una necesidad y a un deseo que el consumidor busca para satisfacer a través de la adquisición de un bien o servicio.
Los motivos de compra son las razones o impulsos que llevan a los consumidores a decidir adquirir un producto o servicio. Estos motivadores pueden ser conscientes o inconscientes y varían ampliamente entre individuos y situaciones. En esencia, los motivos de compra responden a una necesidad y a un deseo que el consumidor busca para satisfacer a través de la adquisición de un bien o servicio.
La relación entre necesidad, deseo y motivo es fundamental en el proceso de compra. Las necesidades impulsan a los consumidores a buscar productos o servicios que las satisfagan, mientras que los deseos determinan las preferencias específicas de los consumidores y los motivos son los que mueven a la decisión de compra. Por ejemplo, 2 personas (Juan y Paula) pueden tener la necesidad de una casa, ese deseo los lleva a buscar por internet casas en venta en su ciudad, pero Juan comprará la casa para revenderla y obtener una ganancia rápida; mientras que Paula la comprará porque la familia crece y necesita más comodidad.
Ha habido muchas clasificaciones para explicar los motivos por los cuales las personas compramos. Les comparto las que me han resultado más sencillas de aplicar.
Los vendedores que no comprenden estos motivadores pueden perder oportunidades. Imagina a un vendedor que presenta su producto sin saber qué mueve al cliente. El comprador percibe que pierde tiempo y que el vendedor no se preocupa por sus necesidades. El diálogo efectivo se desvanece, y con él, la posibilidad de una venta exitosa. La única forma de saber qué mueve al cliente es indagar.
Los motivos de compra son fundamentales para entender el comportamiento del consumidor y desarrollar estrategias de marketing y ventas efectivas.
Cuando los vendedores no identifican los motivos, pueden ofrecer servicios o productos inadecuados para la verdadera necesidad del cliente. Si no sabes que Juan busca ganancia al comprar un inmueble, podrías presentarle un inmueble que no considere su objetivo financiero. El tapiz de la venta se deshilacha.
En el telar de las ventas, la empatía es el hilo dorado. Comprender lo que mueve al comprador es esencial. Cada ejemplo de compra es un patrón en el tapiz, y los beneficios del producto o servicio son los colores que dan vida a la obra.
¿Quieres saber cómo indagar para dar con los motivadores principales que se presentan en un diálogo de ventas y cerrar más rápido? 🌟